Prevenir el abuso sexual a los menores


¡Alerta con los hijos!, la comunicación es la clave

No hay mejor forma de prevenir un abuso sexual hacia los pequeños que la ¡comunicación!

En ocasiones nuestros hijos se acercan para solicitarnos información de algo que los inquieta o por simple curiosidad, a veces no les prestamos la atención debida por cualquier razón o pretexto, “ahorita no tengo tiempo”, “estoy ocupado”, “pregúntale a tu mamá”, etc.

Cuando no hay comunicación se pierde la confianza, que es el lazo fuerte con los hijos. Si no existe la confianza, nace la inseguridad en el pequeño por falta de atención y no ser escuchados.

Hay padres que platican poco con sus hijos, así no hay manera de saber lo que está pasando por sus mentes y poder guiarle o hasta evitar algún conflicto mayor.

Provoque y estimule la comunicación con sus hijos, si no lo ha hecho, le sugerimos comience inmediatamente, y si la tiene felicidades.

Incúlqueles la cultura de la comunicación: escúchelos y póngales atención cuando se acerquen, no los rechace, pues desde ese momento sembramos la confianza o desconfianza ¡no se duerma!

Entrevista a menores por abuso sexual

Se debe tener especial cuidado y trato al entrevistar a los niños. Con frecuencia los menores son la única fuente de información y no debe subestimarse su importancia.

Muchos niños tienen una capacidad extraordinaria de observación y disponen de una excelente memoria. Para la investigación son fabulosos, nadie sospecha de un pequeño para obtener información.

Lamentablemente un gran número de casos en la entrevista a menores es debido a que son víctimas de algún delito, prevaleciendo los de carácter sexual.

La situación de los menores

Referente a la situación de que los menores sean víctimas de abusos sexuales en 1990 se realizó un estudio sobre la procedencia del victimario y esta reflejó lo siguiente:

  • 47% de los agresores son parientes.
  • 40% de los agresores son personas con acceso a ellos (vecinos, maestros etc.)
  • 13% de los agresores son desconocidos.

Otro problema que enfrentan los menores es la incredulidad de sus padres o tutores, mayormente en los casos en que existe relación con el victimario.

Un fator fundamental para los menores y en esencial para la investigación de los hechos relacionados con delitos cometidos contra menores, es la reacción y asimilación del problema para la primera persona que se enteró de los hechos.

Para el menor, éste factor determinará la confianza en sí mismo o de lo contrario causará angustia y rechazo, provocando que intente huir de la realidad y se refugie en si mismo para evadir la situación.